El equipo de José en una de sus típicas formaciones
El “equipo de José” o el Racing de los años 1966/68 fue uno de los conjuntos que revolucionó el fútbol argentino de los años ’60 y muchos lo consideran como el antecesor del famoso Ajax de principios de los ´70 por su gran dinámica y por la ausencia de posiciones fijas.
Juan José Pizzutti, un destacado jugador de la entidad de Avellaneda se había retirado en 1963 jugando para Boca y había sido fugaz director técnico de Chacarita. En septiembre de 1965 tomó la conducción técnica de Racing Club cuando el equipo se encontraba último en la tabla de posiciones, debutó ganando ante el puntero River Plate por 1-0 y lo llevó a un meritorio 5to. puesto al final del torneo perdiendo solamente un encuentro.
La incorporación de Humberto Dionisio Maschio proveniente de Italia para el próximo torneo como organizador del juego, Mori de Independiente, Martinoli y Raffo de Banfield, el brasilero Joao Cardoso como así también la promoción a primera división de los juveniles Cejas, Perfumo, Basile y Díaz le dio nuevos aires al equipo. Con algunos cambios posicionales como la inclusión de Basile como segundo defensor central cuando era volante en inferiores, el “panadero” Díaz de lateral izquierdo cuando jugaba de marcador central y una identidad definida el equipo de José comenzó a arrasar con sus rivales con una sorprendente fortaleza física y un ataque persistente que terminaba por quebrarlos. A medida que transcurrían las fechas el conjunto albiceleste se tornaba invencible. Llegó a mantener un invicto de 39 partidos desde Octubre de 1965 hasta el de Septiembre de 1966 ocasión en la cual cayó ante River por 0-2 de visitante (1) . Esa derrota no detuvo la marcha y tres fechas antes del final del torneo se consagró campeón con 24 ganados 13 empatados y la única derrota mencionada, 70 goles a favor y 24 en contra tras 38 fechas sacándole 5 puntos a su más inmediato perseguidor que no era otro que River Plate.
Manteniendo prácticamente el mismo equipo no fue extraño que se afianzara en la Copa Libertadores. Se habían salvado milagrosamente de caer con un avión que los levaba a Medellín y muchos de sus integrantes manifestaron que si habían zafado de esa tragedia bien podían ser campeones de América y del Mundo
Pasaron a la ronda semifinal donde superó a River, Colo Colo y al complicado Universitario de Lima tras un desempate donde vencieron por 2-1. Enfrentaron en la final al durísimo Nacional de Montevideo, dos paridades en cero en Avellaneda y Montevideo forzaron el desempate en Santiago de Chile donde los argentinos se impusieron por 2-1 con goles de Cardoso y Raffo y conquistaron el torneo más importante de América tras 20 agotadores encuentros (nunca un campeón jugó tantos partidos en la Copa).
“La academia” se coronaba justo vencedor de la Copa cuando un año antes sus clásico rival (Independiente) había hecho doblete y comenzaba a forjar la mística copera que lo distinguiría en la década del ´70
Ese esfuerzo se hizo sentir en el torneo Metropolitano local donde cayó sin atenuantes en la final ante Estudiantes de La Plata por 0-3 en un partido que por momentos fue una batalla.
Igualmente jugarían la Copa Intercontinental frente al desconocido Celtic de Escocia que había vencido en la Copa de Campeones.
El equipo escocés de la comunidad católica había contratado a Jock Stein en marzo de 1965 convirtiéndose en el primer entrenador protestante de la entidad.
Bajo su dirección técnica el Celtic obtuvo las ligas de 1966 y 1967 y las copas de 1965 y 1967. Gracias a la obtención de la primera liga se clasificó para disputar la Copa de Campeones de Europa, donde tras un comienzo firme en cuartos de final remontó en Glasgow ante el Vojvodina yugoslavo un 0-1 que había conseguido como visitante ganando por 2-0. En semifinales venció 3-0 como local al Dukla Praga y empató 0-0 en Checoslovaquia.
Con jugadores de gran experiencia como el veterano arquero Simpson, los durísimos defensores McNeill y Clark, ambos de muy buen cabezazo, el estratega Bertie Auld más el aporte del habilidoso y diminuto pelirrojo Jimmy Johnstone, dueño de un arranque y freno espectaculares – y considerado por los expertos como el mejor futbolista escocés de todos los tiempos – y el temible atacante Bobby Lennox, el Celtic llegaba a la impensada final de la Copa. Tenía la particularidad de ser un equipo de alta raigambre escocesa y regional, puesto que la mayoría de sus integrantes había nacido en Glasgow o sus suburbios.
El 25 de Mayo de 1967 fue el día más importante de la historia del club de Escocia, puesto que se convirtió en el primer equipo de las Islas Británicas en consagrarse vencedor. Su adversario el poderoso Inter de Italia aun dirigido por Helenio Herrera que contaba con grandes figuras tales como Mazzola, Corso, Domenghini, Fachetti, pero con la lamentada ausencia del gran Luis Suárez. Tras remontar en el segundo tiempo un 0-1 tras un gol de penal convertido por Sandro Mazzola los célticos vencieron impensadamente por 2 a 1 con tantos de Gemmell y Chalmers. Así nacía la leyenda de los “Leones de Lisboa”, la superioridad fue tal que los italianos solamente patearon 2 veces al arco. El regreso a Glasgow fue sencillamente conmovedor y los festejos que siguieron durante varios días rubricaron la hazaña.
La primera final intercontinental se jugó en el estadio de Hampden Park de Glasgow ante más de 100.000 espectadores el 18 de Octubre de 1967. Cabe acotar que en las gradas no solamente había hinchas del Celtic sino también de su histórico rival el Rangers alentando a los jugadores escoceses.
El encuentro comenzó con una presión asfixiante del Celtic que se dispuso a sacar ventaja en el tanteador lo más pronto posible, Cejas desvió un fuerte disparo de Lennox y otro tiro de Auld se fue rozando el poste, pero la defensa argentina era muy sólida y lograba contrarrestar cada avance de los “Bhoys”, cada arranque de mitad de cancha de Johnstone terminaba en foul en las cercanías del área racinguista creando serios problemas a los defensores, Hughes desbordaba una y otra vez a Martín por la punta izquierda del ataque escocés y a veces Wallace lo hacía también por derecha, pero todos los centros eran rasantes o aéreos eran despejados por el arquero Cejas, Basile, Perfumo, Rulli o quien se encontrara en el preciso lugar donde caían.
El público se impacientaba y la presión era cada vez más intensa, Racing solamente salió del asedio en un par de ocasiones cuando Maschio y J.J, Rodríguez probaron al arquero Simpson desde media distancia. Así se fue el primer tiempo sin abrirse el marcador.
En el complemento la furia del Celtic no cesó y Auld se lo perdió nuevamente, Racing contraatacó con otro tiro de Maschio que Simpson envió al corner que posteriormente fue despejado por Auld. El juego se torna duro y entrecortado; el árbitro español Gardeazábal advierte a los capitanes para que cese la violencia antes de expulsar jugadores.
Y en el minuto 74 llegó el tan ansiado gol de los locales, un corner de Hughes es rematado violentamente por el capitán McNeil y el tiro es inatajable para Cejas. Johnstone se lo pierde 2 minutos después siendo bien anticipado por Cejas.
A partir de ese momento Celtic afloja la presión quizás para administrar energías para lo últimos minutos y también para cuidar la ventaja. Racing recupera la pelota y a partir de la posesión del esférico crea las mejores situaciones. J.J. Rodríguez esquiva a un par de defensores, remata con convicción y el arquero encuentra el balón, otra vez los mismos protagonistas y el arquero que se juega la vida es fuertemente golpeado por el argentino cuando chocan. El ataque en tromba de Racing pone en serios aprietos por primera vez en toda la noche a la defensa escocesa. Maschio y Raffo manejan todas las pelotas mientras que Cárdenas y Rodríguez intentan desequilibrar, pero el partido se va irremediablemente.
La última ocasión la tuvo nuevamente Johnstone pero una vez más Cejas impidió el gol. El partido ha sido favorable al Celtic aunque no pudo aumentar la diferencia, pero en el ambiente quedó la duda acerca de cuanto podrá mejorar lo que insinuó Racing al final del partido.
La revancha en Argentina sería el 1º de Noviembre en el cilindro de Avellaneda, localidad separaba de Buenos Aires por un puente y brindaría grandes emociones a los espectadores…
Afiches promocionales y entradas a los partidos
El equipo de los "Leones de Lisboa" ganadores de la liga, la Copa escocesa y la COpa de Campeones de Europa en 1967
El equipo de los "Leones de Lisboa" ganadores de la liga, la Copa escocesa y la COpa de Campeones de Europa en 1967
El “equipo de José” o el Racing de los años 1966/68 fue uno de los conjuntos que revolucionó el fútbol argentino de los años ’60 y muchos lo consideran como el antecesor del famoso Ajax de principios de los ´70 por su gran dinámica y por la ausencia de posiciones fijas.
Juan José Pizzutti, un destacado jugador de la entidad de Avellaneda se había retirado en 1963 jugando para Boca y había sido fugaz director técnico de Chacarita. En septiembre de 1965 tomó la conducción técnica de Racing Club cuando el equipo se encontraba último en la tabla de posiciones, debutó ganando ante el puntero River Plate por 1-0 y lo llevó a un meritorio 5to. puesto al final del torneo perdiendo solamente un encuentro.
La incorporación de Humberto Dionisio Maschio proveniente de Italia para el próximo torneo como organizador del juego, Mori de Independiente, Martinoli y Raffo de Banfield, el brasilero Joao Cardoso como así también la promoción a primera división de los juveniles Cejas, Perfumo, Basile y Díaz le dio nuevos aires al equipo. Con algunos cambios posicionales como la inclusión de Basile como segundo defensor central cuando era volante en inferiores, el “panadero” Díaz de lateral izquierdo cuando jugaba de marcador central y una identidad definida el equipo de José comenzó a arrasar con sus rivales con una sorprendente fortaleza física y un ataque persistente que terminaba por quebrarlos. A medida que transcurrían las fechas el conjunto albiceleste se tornaba invencible. Llegó a mantener un invicto de 39 partidos desde Octubre de 1965 hasta el de Septiembre de 1966 ocasión en la cual cayó ante River por 0-2 de visitante (1) . Esa derrota no detuvo la marcha y tres fechas antes del final del torneo se consagró campeón con 24 ganados 13 empatados y la única derrota mencionada, 70 goles a favor y 24 en contra tras 38 fechas sacándole 5 puntos a su más inmediato perseguidor que no era otro que River Plate.
Manteniendo prácticamente el mismo equipo no fue extraño que se afianzara en la Copa Libertadores. Se habían salvado milagrosamente de caer con un avión que los levaba a Medellín y muchos de sus integrantes manifestaron que si habían zafado de esa tragedia bien podían ser campeones de América y del Mundo
Pasaron a la ronda semifinal donde superó a River, Colo Colo y al complicado Universitario de Lima tras un desempate donde vencieron por 2-1. Enfrentaron en la final al durísimo Nacional de Montevideo, dos paridades en cero en Avellaneda y Montevideo forzaron el desempate en Santiago de Chile donde los argentinos se impusieron por 2-1 con goles de Cardoso y Raffo y conquistaron el torneo más importante de América tras 20 agotadores encuentros (nunca un campeón jugó tantos partidos en la Copa).
“La academia” se coronaba justo vencedor de la Copa cuando un año antes sus clásico rival (Independiente) había hecho doblete y comenzaba a forjar la mística copera que lo distinguiría en la década del ´70
Ese esfuerzo se hizo sentir en el torneo Metropolitano local donde cayó sin atenuantes en la final ante Estudiantes de La Plata por 0-3 en un partido que por momentos fue una batalla.
Igualmente jugarían la Copa Intercontinental frente al desconocido Celtic de Escocia que había vencido en la Copa de Campeones.
El equipo escocés de la comunidad católica había contratado a Jock Stein en marzo de 1965 convirtiéndose en el primer entrenador protestante de la entidad.
Bajo su dirección técnica el Celtic obtuvo las ligas de 1966 y 1967 y las copas de 1965 y 1967. Gracias a la obtención de la primera liga se clasificó para disputar la Copa de Campeones de Europa, donde tras un comienzo firme en cuartos de final remontó en Glasgow ante el Vojvodina yugoslavo un 0-1 que había conseguido como visitante ganando por 2-0. En semifinales venció 3-0 como local al Dukla Praga y empató 0-0 en Checoslovaquia.
Con jugadores de gran experiencia como el veterano arquero Simpson, los durísimos defensores McNeill y Clark, ambos de muy buen cabezazo, el estratega Bertie Auld más el aporte del habilidoso y diminuto pelirrojo Jimmy Johnstone, dueño de un arranque y freno espectaculares – y considerado por los expertos como el mejor futbolista escocés de todos los tiempos – y el temible atacante Bobby Lennox, el Celtic llegaba a la impensada final de la Copa. Tenía la particularidad de ser un equipo de alta raigambre escocesa y regional, puesto que la mayoría de sus integrantes había nacido en Glasgow o sus suburbios.
El 25 de Mayo de 1967 fue el día más importante de la historia del club de Escocia, puesto que se convirtió en el primer equipo de las Islas Británicas en consagrarse vencedor. Su adversario el poderoso Inter de Italia aun dirigido por Helenio Herrera que contaba con grandes figuras tales como Mazzola, Corso, Domenghini, Fachetti, pero con la lamentada ausencia del gran Luis Suárez. Tras remontar en el segundo tiempo un 0-1 tras un gol de penal convertido por Sandro Mazzola los célticos vencieron impensadamente por 2 a 1 con tantos de Gemmell y Chalmers. Así nacía la leyenda de los “Leones de Lisboa”, la superioridad fue tal que los italianos solamente patearon 2 veces al arco. El regreso a Glasgow fue sencillamente conmovedor y los festejos que siguieron durante varios días rubricaron la hazaña.
La primera final intercontinental se jugó en el estadio de Hampden Park de Glasgow ante más de 100.000 espectadores el 18 de Octubre de 1967. Cabe acotar que en las gradas no solamente había hinchas del Celtic sino también de su histórico rival el Rangers alentando a los jugadores escoceses.
El encuentro comenzó con una presión asfixiante del Celtic que se dispuso a sacar ventaja en el tanteador lo más pronto posible, Cejas desvió un fuerte disparo de Lennox y otro tiro de Auld se fue rozando el poste, pero la defensa argentina era muy sólida y lograba contrarrestar cada avance de los “Bhoys”, cada arranque de mitad de cancha de Johnstone terminaba en foul en las cercanías del área racinguista creando serios problemas a los defensores, Hughes desbordaba una y otra vez a Martín por la punta izquierda del ataque escocés y a veces Wallace lo hacía también por derecha, pero todos los centros eran rasantes o aéreos eran despejados por el arquero Cejas, Basile, Perfumo, Rulli o quien se encontrara en el preciso lugar donde caían.
El público se impacientaba y la presión era cada vez más intensa, Racing solamente salió del asedio en un par de ocasiones cuando Maschio y J.J, Rodríguez probaron al arquero Simpson desde media distancia. Así se fue el primer tiempo sin abrirse el marcador.
En el complemento la furia del Celtic no cesó y Auld se lo perdió nuevamente, Racing contraatacó con otro tiro de Maschio que Simpson envió al corner que posteriormente fue despejado por Auld. El juego se torna duro y entrecortado; el árbitro español Gardeazábal advierte a los capitanes para que cese la violencia antes de expulsar jugadores.
Y en el minuto 74 llegó el tan ansiado gol de los locales, un corner de Hughes es rematado violentamente por el capitán McNeil y el tiro es inatajable para Cejas. Johnstone se lo pierde 2 minutos después siendo bien anticipado por Cejas.
A partir de ese momento Celtic afloja la presión quizás para administrar energías para lo últimos minutos y también para cuidar la ventaja. Racing recupera la pelota y a partir de la posesión del esférico crea las mejores situaciones. J.J. Rodríguez esquiva a un par de defensores, remata con convicción y el arquero encuentra el balón, otra vez los mismos protagonistas y el arquero que se juega la vida es fuertemente golpeado por el argentino cuando chocan. El ataque en tromba de Racing pone en serios aprietos por primera vez en toda la noche a la defensa escocesa. Maschio y Raffo manejan todas las pelotas mientras que Cárdenas y Rodríguez intentan desequilibrar, pero el partido se va irremediablemente.
La última ocasión la tuvo nuevamente Johnstone pero una vez más Cejas impidió el gol. El partido ha sido favorable al Celtic aunque no pudo aumentar la diferencia, pero en el ambiente quedó la duda acerca de cuanto podrá mejorar lo que insinuó Racing al final del partido.
La revancha en Argentina sería el 1º de Noviembre en el cilindro de Avellaneda, localidad separaba de Buenos Aires por un puente y brindaría grandes emociones a los espectadores…
N del R. (1) Ese récord fue quebrado recién en 1998/9 por Boca Juniors que alcanzó finalmente la marca de 40 partidos y fue vencido en la siguiente fecha 4-0 por Independiente aunque igualmente se consagró vencedor del torneo Clausura 1999.
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